Las águilas no se reúnen con ninguna otra especie de aves, sino entre ellas mismas, porque tienen unas características en específico. Y tú también has sido llamado a un lugar en específico, donde Dios ha preparado abundancia y bendición, para llevarte a alcanzar todo lo que él te ha prometido.
En Job 39:30, hay una declaración muy interesante que dice que, donde están los cadáveres, ahí están las águilas. En Mateo 24:28, Jesús dice: Porque dondequiera que estuviere el cuerpo muerto, allí se juntarán las águilas. Este último es un verso profético que hace referencia a los tiempos finales, y tiene una connotación escatológica. Estos versos traen controversia por varias razones, y es que las águilas no comen cadáveres; pero, dentro de las declaraciones proféticas es permitido el uso de ciertas imágenes, de ciertas descripciones, para poder llevar un punto.
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